Quererse a uno mismo es tener oportunidad de sacar la mejor versión de cada uno,
mostrando el potencial que tenemos a todos los niveles: afectivo,
romántico, espiritual, humano, social… Quererse a uno mismo también
significa ser honestos con nosotros mismos y con los
demás, y comprometernos con la vida y el bienestar propio y ajeno.
Aunque esto algunas veces es juzgado como un supuesto interes.
Quererse
a uno mismo también implica estar atento a nuestras necesidades vitales
incluido el amar como necesidad vital ya que somos seres sociales y
amorosos pero también antes es necesario aceptarnos, respetarnos y
amarnos por ser quienes somos.
¿Cómo me amo?
1. Planteo con optimismo el presente para construir un buen futuro
¿Qué hago hoy que me va a ayudar en el futuro?, ¿Lo que estamos haciendo contribuya a la vida futura?
Aprendí a romper con las falsas creencias que condicionan nuestro
presente y nuestro futuro, porque las cosas valiosas de nuestra vida
actual y de nuestra personalidad son nuestra estructura.
2. Me Atrevo a ser yo mismo y a mostrarme tal como soy
Aprendi de alguien que tiene una facilidad de mostrarse diferente en un lado y otro en otro lado es otro, al final el quererse
a uno mismo significa mostrarse tal cual somos en los distintos ámbitos
en que nos movemos. Debemos afrontar la realidad, con sus obstáculos y
dificultades. Siendo concientes de nuestro potencial podemos conectar
mejor con las personas y enfocarnos hacia nuestros objetivos personales
mas no a satisfacciones personales.
3. Quererse a uno mismo es ser capaz de amar a los demás y entregarse sin esperar nada
Aprender
a querernos a nosotros mismos nos va a reportar una mayor capacidad
para amar a otras personas. ¿Por qué? Desde una buena base de
autorrespeto estamos en sintonía con las demás personas que también se
quieren a sí mismas, y podemos entablar relaciones saludables que nos
permiten relacionarnos desde la sinceridad y poder crecer y madurar
juntos.Si no se ama, como puede amar a alguien.
4. Lucho y confronto mis miedos y ataduras
Cuando
estamos preparados para asumir quiénes somos no solo nos amarnos a
nosotros mismos sino que sacamos de nuestro ser la presión por fracasar y
de obtener libertad sin miedos de por medio.
5. Abrir mi mentalidad y liberarme: la vida es nuestra
Amarse
a uno mismo es también abrirse y liberarse de ciertos condicionamientos
y expectativas que otros han depositado en nosotros. Es salir del metro
cuadrado y explorar otras posibilidades sin bloquear o dar negativismo
sin probar siquiera. Es dejar de juzgar y ponerle el sentido negativo a
algo no explorado.
No podemos permitir que nuestra vida transcurra en una especie de
burbuja, debemos tratar de superar las ataduras, comprender que solo
están en nuestra mente y empezar a conectar con personas o aficiones que
no nos habíamos dado la oportunidad de conocer.
6. Olvido de las máscaras sociales
Soy una persona
muy libre, tengo un círculo social que me quieren y no necesito a nadie
más. A viva voz se dice: SOY FELIZ PORQUE ME TENGO A MI con una gran
mascara de mirar amargura, frustración tapado con alcohol.
Amarse a uno mismo es, como hemos visto en el segundo punto, despojarnos de máscaras, creencias y convencionalismos.
7. Me acepto conociendo mis límites
Nadie
es perfecto, nadie. Para quererse a uno mismo no es necesario tener
aspiraciones y ambiciones irreales, o entrar a un espiritualismo falso
sino más bien luchar día a día por mejorar en lo posible, es necesario,
nuevamente, SALIR DE LA ZONA DE CONFORT, pero dentro de nuestras
posibilidades, en una medida racional y en tiempo adecuado. Habrá cosas
de la vida que nos gustarán más o menos, y por tanto hay que saber
escoger las que nos hacen felices y profundizar en ellas.
8. Me quejo menos y disfruto más - sueño más
Aguanté
un mes y medio de negativismo como experiencia personal, busque si me
espejeaba pero no. El quejasrse es una forma de no hacernos responsables
de nuestras acciones, sin victimismo ni lamentos. ¿Tiene algún sentido
pasar el día quejándonos?
9. Desarrollo tu potencial a su máxima potencia
Todos
tenemos talentos y podemos explorar y explotar. Una de las claves para
desarrollarnos como personas es realizarnos en base a actividades que
nos supongan un reto divertido y apasionante. Tenemos que dejar fluir
nuestra creatividad e ingenio para ser concientes del gran potencial que
atesoramos.
10. Me arriesgo a vivir experiencias únicas
¿Sabes
cuántas personas tienen una vida gris por el simple hecho de no tomar
las riendas de su vida? He invitado a explorar pero cuando excuchan, ser
compañero en el camino de vida, el terror viene a su mente. Su vida
rutinario, se va viendo pasar los días sin salir de la rutina que es una
de las maneras de tener una autoestima nefasta. Hay que aprender a
arriesgar, sea en el plano sentimental, laboral, o en cualquier otro.
Arriesgar implica liberarse de muchos temores que acarreamos. Este punto
es imprescindible para que nuestra fuerza interior despierte de una vez
por todas. Esto nos ayuda a probar nuestra resiliencia y pero sobre
todo fortaleza.
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